Espacio Natural de Segade, en Caldas de Reis
A escasos 2 kms de Caldas de Reis dirección a Cuntis -PO640- se encuentra el hermoso espacio natural de Segade formado por la «cascada» con las aguas que lleva el Río Umia, por un mar de cantos rodados de granito erosionado, por un viejo edificio que antaño había sido una hidroeléctrica, pasarelas de madera, miradores y antiguos molinos harineros.
La rapidez de las aguas del río Umia forman una cascada de más de 30m de caída en la que las pozas, los rápidos y los toboganes naturales sobre los bolos graníticos erosionados son una constante que definen la belleza de la Cascada de Segade.
Continuando con la visita al espacio natural podemos disfrutar del salto de agua tortuoso e irregular que hacen las aguas del Umia, bañando cantos rodados y márgenes repletos de vegetación autóctona. El sonido del agua se mezcla con el silencio que emana de los viejos molinos construídos para aprovechar la fuerza y empuje de unas aguas que bajan ágiles y revueltas para mover en tiempos antiguos las ruedas harineras. Vegetación, piedras ersionadas y pasarelas de madera completan este bello y tranquilo espacio natural de Segade.
Los vestigios de la vieja central hidroeléctrica de Segade
Los orígenes de la antigua central hidroeléctrica se remontan a 1.899 cuando los propietarios de la empresa Presser y Compañía solicitan permiso al Gobierno Civil de Pontevedra para generar una producción de 442km/h utilizando para ello dos dinamos instalados en la central. En ese año y mediante subasta pública la compañía logra los contratos para abastecer los alumbrados públicos de Caldas, Cambados, Vilagarcía…
En 1.901 abastecía electricidad a unos 983 abonados. La central permaneció en servicio durante más de 50 años, hasta que finalmente fue cerrada en 1955 siendo propiedad ya de FENOSA. Hoy estos vestigios representan el orígen de la electricidad gallega y ha sido una de las dieciséis que estaban ya en funcionamiento en 1.899.
La senda desde la Casada de Segade a Caldas de Reis
Tanta la Cascada de Segade como la villa de Caldas de Reis están unidas a través de un sendero de poco más de 1 km que transcurre paralelo a las aguas del Umia.
Se trata de un itinerario de dificultad baja, muy bien señalizado en el que, entre el sonido que producen las aguas del río, se descubren preciosas casas de piedra ocupando los viejos molinos, otros en estado ruinoso, pontellas de piedra, vegetación de ribera, … un agradable paseo que llega o parte desde la histórica carballeira formada por unos 200 ejemplares y el jardín botánico del s.XIX catalogado como Bien de Interés Cultural desde 1962. ¡Haz la ruta en la dirección que quieras!
¡No te lo pierdas!
Poco después de la Cascada de Segade se hayan otros rincones llenos de arte, encanto y misterio que no debes perderte.
A la altura del lugar de A Baxe -en la carretera PO221 dirección Moraña- se encuentra este puente romano de A Baxe, del siglo I y de un solo arco, por el que pasaba la vía interior que iba desde Tui a Caldas de Reis. Este puente fue profundamente remodelado, en el año 1729, por el párroco del lugar. En este mismo puente existen unos pasos entre grandes rocas y escaleras pronunciadas que llegan al margen del Río Umia desde el cual tenemos una hermosa panorámica del viejo puente, además de las bocas y trampillas por donde el agua captada era canalizada hacia la central hidroeléctrica de Segade.
Finalmente para completar la visita al entorno de Segade debemos descender hasta un mirador próximo desde el cual la vista de los vestigios de la central hidroléctrica, de la propia cascada y del paisaje; sen convertirá en una panorámica muy completa con la que poner el broche de oro a este recinto natural.
Y muy cerca de Segade, se encuentra la vieja Fábrica Azucarera de Portas ¡No dejes de visitarla!
