O Pozo do Arco, el enclave más asombroso de Oia

Descubrimos uno de los encantos naturales más ocultos del Concello de Oia, o Pozo do Arco. Un bello rincón que guardan con celo las impresionantes estribaciones montañosas de A Serra da Groba. Concretamente, es en la parroquia de Burgueira dónde se encuentra este espacio, de fácil acceso y bien acondicionado para que la visita se convierta en toda una experiencia.

A Serra da Groba está formada por montes que alcanzan los 600m de altitud en los que puedes encontrar un importante legado arqueológico en forma de vestigios de calzadas, castros, viejas fortalezas, petroglifos … además de increíbles miradores, cursos fluviales y ganado mostrenco viviendo entre matorrales y extensos pinares.

Pozo do Arco, una senda circular

Este lugar ha sido objeto de un importante plan de acondicionamiento planificado y ejecutado por la Comunidad de Montes de Burgueira en el año 2011. Dicho plan ha permitido crear todo un producto turístico entorno al Río Tamuxe, principal protagonista de la senda circular creada por sus dos riberas de poco más de un 1km de longitud.

Desde el estacionamiento de vehículos desciende un camino forestal hasta el área de recreo acondicionada para recibir y ocupar a los visitantes. En este punto arranca la senda de O Pozo do Arco practicable en ambos sentidos. El recorrido cuenta con caminos empedrados, vallas de madera, papeleras, bancos con vistas panorámicas y puntos «selfie», sin olvidarnos de los 2 molinos perfectamente restaurados.

Por la parte norte, pasarás de una ribera a otra gracias a una pasarela de metal unida al paso de una imponente tubería ¡Resulta llamativa! Y por la parte sur, el sendero de O Pozo do Arco se une gracias a un majestuoso puente de madera de singular composición. Seguramente, el recurso más fotografiado del entorno natural.

O Pozo do Arco es un entorno atractivo y mágico, un lugar limpio y armonioso que genera una agradable sensación de bienestar, de tranquilidad interior, de calma … ¡Siéntate en silencio y siente su magia!

Cascadas, pozas y rápidos

A medida que se avanza por la senda circular hay un recurso que se convierte en el gran protagonista: el río Tamuxe con sus aguas color turquesa. Discurre en desnivel formando un curso fluvial encajado entre paredes de granito erosionadas cuyas características orogénicas permiten la formación de cascadas, rápidos y preciosas pozas naturales. Sin duda, se trata de un entorno natural único que bien se merece una visita, ¡disfrútalo!